¡SEA POR SIEMPRE GLORIFICADA
LA MISERICORDIA DEL SEÑOR!
Aquél que dijo:
«¡FUEGO HE VENIDO A TRAER A LA TIERRA!» Y
¿QUÉ HE DE QUERER SINO QUE ARDA?» (Lc.12,49)
Viendo que hoy la humanidad se ha enfriado en el amor, nos ha transmitido un urgente MENSAJE a través de Sor Faustina Kowalska. Proclamada Santa por SS. Juan Pablo II el 30 de abril del 2000. Y nosotros inflamados por ese fuego divino, lo hemos acogido.
Este Apostolado, siguiendo los impulsos del Espíritu Santo y bajo la autoridad de nuestro Obispo, desea ayudar a Jesús en su Obra de salvación y renovación del mundo y recordar a las almas que DIOS ES AMOR MISERICORDIOSO, que ansía perdonar y aque apesar de nuestras miserias nos ama con locura.
«Las llamas de la misericordia me abrasan…
Deseo verterlas sobre las almas humanas…
¡Grande es el dolor que me afligen cuando
no vienen a recibirlas!» ( Del Diario de Santa Faustina)
Para realizar esta misión, nos hemos consagrado a la Reina de los Apóstoles, la Virgen María, Madre de Dios y Madre nuestra. Cogidos de su mano nos hemos puesto a caminar muy seguros pues ella nos guía, nos alienta y protege.
Ansiamos que JESÚS MISERICORDIOSO, presente en el Sacramento de la Eucaristía, reine en todas las almas. Les estamos preparando el trono en una magnifica custodia; por eso este Apostolado además de propagar la devoción, los mensajes y la espiritualidad de la Divina Misericordia, promueve la importancia de la Santa Misa, gran misterio de amor, y también la adoración eucarística. ¡JESUS EUCARISTÍA!
¡NUESTRO REY! ¡REY DE MISERICORDIA!
La venida del Reino glorioso de Cristo, coincidirá con el máximo esplendor de la Eucaristía y entonces, Él se manifestará con toda su potencia cambiando los corazones, las almas, las familias, la sociedad, el mundo; por ello nos afanamos con entusiasmo y trabajamos con gozo y esperanza.
¿QUIERES AYUDAR A JESÚS A SALVAR AL MUNDO ¡AYÚDANOS!
Telefonear al 93 426 16 22
E-mail: adim.bcn@gmail.com
«COMUNIDAD DE LA DIVINA MISERICORDIA»
Adoradores y adoradoras de Jesús para extender su Reino; al servicio de los hambrientos y sedientos de Dios. Esta Comunidad, fue aprobada en el año 2005 canónica y jurídicamente dentro de los estatutos de la asociación «Adoradores de la Divina Misericordia» y nació de los buenos frutos que ha estado dando la difusión del Mensaje de la Divina Misericordia que desdeel año 1990 está efectuando el Apostolado de la Div. Mis. por medio de la revista «El Amor Misericordioso» y miles de trípticos que se han enviado gratuitamente por toda España. Esta revista ha sido y es el órgano difusor de la Asociación.
La Comunidad de la Divina Misericordia, que como ya se ha dicho anteriormente, está aprobada dentro de los estatutos de la Asociación, ya había empezado a existir hace varios años, pero por varios motivos se disolvió, especialmente por falta de vivienda propia. Sin embargo, disponemos de dos pequeñas habitaciones al lado mismo de la capillita, que están a disposición de alguna persona amiga y conocida por su interés en el Mensaje y devoción a la Divina Misericordia, la cual desee pasar unos días de retiro en silencio para profundizar en su vida espiritual, y ayudarnos en nuestros trabajos cotidianos.
Llama al teléfono 934 261 622, si deseas información o saber si están libres las habitaciones. Se puede dejar recado en contestador
«ESTA OBRA ES MÍA» le dijo Jesús a Santa Faustina Kowalska. Las personas aún inconscientemente buscan la «Verdad» en medio de tanta confusión y oscuridad; buscan a Dios, al verdadero Dios, a Aquel que solo se encuentra verdaderamente a través de Cristo en su Evangelio y en su Iglesia santa fundada por Él. ¡»DADNOS A DIOS!» le claman las almas a Santa Faustina, y nosotros, esta Asociación, desde nuestra pequeñez e impotencia deseamos acercárselas, con nuestras oraciones, nuestro trabajo personal y especialmente adorándole y haciéndole compañía en el Santísimo Sacramento, en donde Jesús-Eucaristía nos espera siempre para abrazarnos, perdonarnos y derramar infinitas gracias sobre las almas.
Únete a nosotros para satisfacer los deseos ardientes de Jesús Misericordioso y bajo la guía de nuestra dulce Madre, María Santísima y consagrados a Ella, caminaremos unidos hacia la meta, y el Señor hará maravillas, estamos seguros. SÍ, EL MUNDO PUEDE CAMBIAR, pues
«N A D A E S I M P O S I B L E P A R A D I O S»